Deudas en comunidades de propietarios

Las deudas de las comunidades de propietarios prescriben a los cinco años según la normativa vigente desde 2015. Por ello, es fundamental obtener un certificado de deuda antes de comprar una propiedad para evitar asumir deudas previas. De acuerdo con el artículo 9 de la Ley de Propiedad Horizontal, todos los propietarios deben contribuir a los gastos comunes, aunque en algunos casos algunos acumulen deudas por incumplimiento de sus obligaciones.

El plazo de reclamación de estas deudas es de cinco años, y si no se presentan acciones judiciales dentro de ese tiempo, la deuda expira legalmente. Sin embargo, el plazo puede interrumpirse mediante una reclamación formal, aunque su validez dependerá de la forma y la fecha del requerimiento. Es clave que las comunidades de propietarios mantengan registros actualizados para gestionar correctamente los pagos y que los compradores sean conscientes de las deudas que podrían asumir.

Además de las obligaciones económicas, las comunidades de propietarios deben cumplir con la normativa de protección de datos, como el RGPD y la LOPDGDD. Los propietarios tienen derechos sobre sus datos personales, incluyendo acceso, rectificación y supresión, y la comunidad debe responder a sus solicitudes en un mes. Cumplir con estas normativas es crucial para evitar sanciones y garantizar la transparencia en la gestión comunitaria.

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